Juan José Oyarzún, gran maestro de la Logia de Chile:
"La logia es una institución discreta. Un hombre puede decir que es masón, pero no dar a conocer el nombre de otros masones, pues reconocerse masón es una decisión personal", aseguró Juan José Oyarzún, gran maestro de la Logia de Chile, quien lleva 47 años en la Orden.
"Hay muchas organizaciones que no quieren saber nada con la masonería, fundamentalmente aquellas que son enemigas de la libertad. En la dictadura no prospera la logia, porque para nosotros la libertad de conciencia es vital", expresó.
-¿Quiénes pueden ser masones?
-Nosotros hacemos una labor de selección, pues no hay una solicitud de ingreso. Quien quiera entrar debe buscar algún "socio" que lo patrocine y que lo presente.
"Luego, el nombre del postulante se discute en el seno de una logia y después pasa a un órgano de difusión en todo el país. Durante dos o tres meses su postulación circula y vuelve a la base.
"Si no surge ningún inconveniente, se vota nuevamente y recién el hombre sabe que está siendo propuesto. Es una labor de selección bastante rigurosa, pero de todas maneras al rabbi (maestro) de Galilea le falló uno de los 12 apóstoles y a nosotros también se nos ha caído alguno".
-¿Qué se hace en la logia?
-Nos dedicamos a estudiar, pues el papel de la Logia Masónica es preparar hombres que son elegidos del mundo profano (fuera del templo). Son personas potencialmente perfectibles, porque no buscamos a los hombres perfectos, ya que no existen.
"Tratamos de corregir en ellos los defectos de herencia o los que han ido adquiriendo durante su vida".
-¿Cuál es la ideología de los masones?
-Los masones no tenemos ideología, sino más bien principios y valores, por lo que no podemos hablar de una doctrina masónica.
-¿Han habido masones que han llegado en forma equivocada a la logia?
-Sí, hay gente que llega equivocada, creyendo que van a encontrar un resorte para sus ambiciones personales.
"Una vez adentro, descubren que hay más que dar que recibir y que se deben dedicar fundamentalmente a estudiar desde el día que ingresaron hasta el día que murieron".
-¿Son expulsados por algún motivo?
-Sí, tenemos tribunales propios y hay una diferencia con los tribunales profanos: nuestros tribunales fallan en conciencia y hacen sumarios para los miembros activos de la orden y para los que ya no están.
-¿Puede ser un factor de expulsión problemas que surjan en la vida privada de algún masón?
-No, nosotros somos muy cuidadosos de la vida privada de la gente. De hecho, ni siquiera nos metemos con los sentimientos religiosos, pues pensamos que es algo íntimo "como una camiseta".
"Algunas personas creen que somos anti religiosos, pero en realidad nosotros no somos "anti nada" y cuando uno de nuestros socios fallece y la familia pide velarlo en la Iglesia, nosotros respetamos esa solicitud profundamente.
"En la masonería los únicos que no pueden ingresar son aquellos cuyas organizaciones se los prohiba. La Iglesia Católica todavía castiga con excomunión al que ingresa a una logia masónica. El Partido Comunista también tiene establecida la incompatibilidad.
"Nosotros no ponemos a nadie en la interdicción. El único motivo por el cual un hombre se va de la Orden es porque ha vulnerado los principios que fundamentalmente son éticos.
"Tenemos un sólo mandamiento: «Nunca le hagas a otro lo que no te gustaría que hicieran contigo» y cuando un hombre no respeta eso tiene que irse".
-¿Existen masones creyentes de Dios?
-Muchos. Ultimamente han ingresado muchos evangélicos, especialmente en el sur. También hay católicos, miembros de la colonia judía y habemos agnósticos (libres pensadores). Antes decían que éramos impíos y ateos, lo que forma parte de la leyenda negra de la masonería.
-Cuando usted asumió dijo que los masones habían salido de las penumbras...
-Exactamente y estoy muy contento con los resultados, porque ha habido buena acogida por parte de la gente que está afuera de la masonería. Existe mayor interés por ingresar, sobre todo, porque estamos sirviendo a la sociedad como un referente ético.
"Dentro de la leyenda negra de la masonería era común decir: «oye, fulano de tal es muy buena persona, pero lástima que sea masón» o bien «qué buena carrera que tiene fulano de tal, pero porque es masón...».
"Nos acusaban de ser una sociedad de socorros mutuos que hacía de palanca para carreras políticas y profesionales, lo que no es así.
"Lo único que queremos es que la gente piense que por hecho de ser masones somos una garantía, porque nos comportamos correctamente y no porque estemos obligados, sino porque cultivamos la conciencia".
-¿Hay mujeres en la logia?
-La condición es ser hombre, pero hay una gran Logia Femenina de Chile.
"Somos un referente ético social"
jueves, agosto 17, 2006