Por M:.R:.H:. JEFFERSON I. J. SCHEER
Presidente electo de CLIPSAS
Gran Maestro
Gran Logia Unida de Paraná (Brasil)
No es poco, para cualquier asociación, alcanzar los 45 años de existencia. Es una larga existencia, prueba viva de seriedad y de consolidación.
Aparentemente, en los primeros tiempos de su existencia Clipsas actuó como brazo político de algunas grandes obediencias europeas que participaron de su fundación. Sin embargo, después de 1996, se operó un gran cambio.
Diversos miembros, incluso algunos fundadores, contrariados porque no lograron imponer las modificaciones que querían, habiendo sido derrotados en diversas votaciones, decidieron alejarse de Clipsas. Esa ruptura causó gran conmoción y amenazó debilitar la organización. Intentaron de todas maneras vaciar Clipsas ya sea captando a sus miembros, o creando otros organismos cuya finalidad era competir con él.
En vano. Las dificultades sirvieron para que la gran mayoría de los miembros se apegase todavía más a los ideales de Clipsas de libertad absoluta de conciencia.
Y hubo quien permaneció fiel a los principios, a la idea de tener una organización liberal de nivel mundial, y bajo las presidencias de Javier Otaola (Gran Logia Simbólica Española) y Marc-Antoine Cauchie (Gran Oriente de Luxemburgo), Clipsas se reorganizó y resistió a los golpes recibidos de todos lados. Más y más miembros se incorporaron, de modo que la representatividad mundial se volvió aún mayor.
Con el transcurso del tiempo, e importantes adhesiones de todos los países, CLIPSAS fue realmente volviéndose un Centro de Comunicación e Información.
El resultado es que tenemos actualmente un CLIPSAS fuerte, representativo de la masonería liberal y adogmática mundial y que aún busca una definición más precisa de su papel en el mundo actual.
Pienso que la respuesta a esa inquietud está en su nombre: CENTRO DE COMUNICACIÓN E INFORMACIÓN.
Europa, África, Ásia, Américas del Norte al Sur están representadas por más de 50 organismos masónicos. El lema de CLIPSAS: libertad absoluta de conciencia da la palabra clave de su éxito.
En la época en que vivimos, el ser humano no busca más dogmas para aprisionarlo. Al contrario, busca formas de verse libre de las cadenas que por tanto tiempo oprimieron su libertad de conciencia.
CLIPSAS reúne la masonería liberal y adogmática y tiene su organización en torno a su Asamblea anual, dividida principalmente en dos días de trabajos, uno de ellos dedicado al Coloquio. En este día, masones y masonas de todas partes del mundo exponen sus opiniones, de las más simples a las más intelectualizadas, sobre un tema que fue adoptado para estudio por la Asamblea General anterior.
El Coloquio y los trabajos que allí se presentan concretan nuestros aportes culturales en el debate de temas importantes no sólo para el hombre masón sino también para toda la humanidad. Esos trabajos son accesibles a todos en el sitio Web de Clipsas.
Las potencias masónicas integrantes de CLIPSAS disponen, así, de todo el año para preparar trabajos sobre el tema propuesto. Eso permite una indiscutible calidad.
Al otro día, la Asamblea General propiamente dicha, discute y decide sobre toda la administración de Clipsas, eligiendo la directoria (Bureau).
No menos importante es lo que ocurre en los intervalos de las reuniones y comidas: la comunicación entre los miembros, que así tienen la oportunidad de conocerse, de intercambiar experiencias sobre lo que se hace en el ámbito de cada potencia, de cada logia, los rumbos tomados por la masonería en su país y detalles sobre la ejecución de cada rito.
Es placentero ver las diferentes potencias firmando acuerdos formales de amistad y reconocimiento recíproco. Es reconfortante ver los grupos mezclados, buscando alterar los componentes de las mesas a cada comida, como si todos quisiesen con avidez intercambiar con el mayor número de personas sus propias experiencias. Esta comunicación se proyecta durante todo el año, con las múltiples invitaciones que se recibe para las más diversas ceremonias y conmemoraciones masónicas.
Esa comunicación se estrecha cuando nosotros, año tras año, tal como los antiguos miembros de las corporaciones de artes y oficios, nos reunimos para mostrar nuestros trabajos, traer las novedades y despedirnos para un año más de labores.
Tiempos atrás CLIPSAS publicaba una Revista la CLIPSAS NEWS la cual traía importantes informaciones de intereses de sus miembros y de los masones en general.
Hoy, en tiempos de dificultades financieras para publicar y distribuir por el mundo una revista, les restó a los sitios Web tanto de Clipsas como los de sus miembros, ese trabajo de información.
Esa tarea de Centro de Información puede mejorar mucho si los miembros se sienten incentivados a llevar al sitio Web de Clipsas sus contribuciones. Esa página Web debe constituirse en un instrumento de intercambio de informaciones. Ya sea de las informaciones que Clipsas tiene para llevar a sus miembros, o de lo que estos tienen a informar unos a otros.
Nadie puede negar la representatividad de Clipsas que es la mayor organización de la masonería liberal del mundo.
Hoy Clipsas tiene las finanzas en buenas condiciones, tiene estabilidad sin temores de sorpresas, y está en vías de definir rumbos para su porvenir.
Soy por principios un idealista. Creo en la perfectibilidad del ser humano y creo que es posible llegar a una verdadera fraternidad entre masones. Pero tenemos que trabajar para eso, especialmente poniendo en práctica valores de igualdad, libertad y fraternidad.
Tendríamos que volver un poco para nuestros tiempos de recién iniciados y recorrer nuestros rituales del primero al tercer grado y redescubrir el idealismo, lo de caballeresco que tiene la masonería y, tratando de volver a eso, despojarnos de nuestros orgullos de serenísimos, de ilustres y poderosos, de soberanos y otras tantas cosas que llamamos de títulos y cualidades masónicas. Tenemos que volver al humanismo de la condición de aprendiz que con sus pasos titubeantes está aprendiendo el significado de todo.
Así, con humildad de aprendices podremos resolver nuestras diferencias y aspirar a una vida masónica, llena de paz, de fraternidad y con absoluta libertad de conciencia.
Hay otras cosas más. Están los miembros que partieron. No concuerdo que el principal objetivo de un presidente sea el de pasar todo su tiempo buscando su regreso. Creo que debemos mostrarles los caminos que recorre Clipsas actualmente, dejando claro que tenemos las puertas abiertas a las potencias masónicas que se identifiquen con ellos.
Mucho se habló sobre las Naciones Unidas. Se habló de que Clipsas participase en la condición de observador, como otras ONG’s (Organizaciones No Gubernamentales). Hablamos mucho sobre eso y poco hicimos en términos materiales para alcanzar esa meta. Creo que debemos discutir esa cuestión en el seno de Clipsas porque hay entre los miembros, los que son favorables a la exteriorización y otros que están en contra. Debemos dejar bien claro a que título sería nuestra participación. Si vamos a hablar en nombre de los miembros de Clipsas, si vamos a hablar en nombre de la Masonería Liberal y Adogmática, en fin, que vamos a hacer, como nos vamos a comportar una vez que lleguemos a ser admitidos.
Por último, me gustaría dejar bien claro que no soy un candidato de división. No quiero ser un Presidente de las Américas o de América Latina. Antes prefiero volver a la condición de representante de mi Gran Logia, a participar como me sea posible y no causar divisiones o luchas por vanas diferencias o por el título formal de Presidente.
Quisiera tener compañeros Vicepresidentes y Vicepresidentas con el compromiso de trabajar seriamente por los fines principales del Clipsas de hoy, que deben ser la COMUNICACIÓN y la INFORMACIÓN.
No nos olvidemos que CLIPSAS tiene un capital, un patrimonio histórico de casi 50 años de existencia. No es poco. Tiene representatividad en todo el hemisferio occidental. Es la mayor organización masónica liberal y adogmática del mundo. No es poco.
Atentamente
Porto, 18 de mayo de 2007.
CLIPSAS 45 Años. Balance y Perspectivas
lunes, mayo 28, 2007