El evento se encuentra bajo extremas medidas de seguridad y absoluta descreción. Asisten más de mil 200 delegados de 44 países
Bogotá, 1 de abril.- El 21 Congreso Masónico Internacional, al que asisten más de mil 200 delegados de 44 países, comenzó hoy aquí bajo extremas medidas de seguridad y absoluta discreción para, según los organizadores, evitar "malos entendidos".
El general de maestros de la logia diplomática, el peruano Manuel Meoño, dijo que "nuestro congreso se realiza en absoluta reserva por seguridad para los miembros de la logia y para evitar malos entendidos".
El encuentro, en el cual participan delegados de todo el continente americano y de algunos países europeos, como España, Francia e Italia, se lleva a cabo en el hotel Tequendama, uno de los más exclusivos de Bogotá.
Meoño afirmó que el conclave, que inició bajo rigurosas medidas de seguridad, trabajará con dos agendas, una interna y otra abierta, para diferenciar los asuntos institucionales de los temas de interés global.
En la agenda institucional, los delegados discutirán asuntos internos de las logias masónicas en el mundo, debate que se hará de manera "discreta y reservada", dijo Meoño.
Explicó que los masones también analizarán, sobre la base de ponencias, algunos temas de política internacional, crisis económica, medio ambiente y asuntos sociales.
Los masones, a nivel mundial, cada vez buscan una mayor participación en eventos públicos, pero manteniendo cierto grado de discreción, dijo Meoño durante la apertura del Congreso que finaliza el próximo sábado.
Bogotá, 1 de abril.- El 21 Congreso Masónico Internacional, al que asisten más de mil 200 delegados de 44 países, comenzó hoy aquí bajo extremas medidas de seguridad y absoluta discreción para, según los organizadores, evitar "malos entendidos".
El general de maestros de la logia diplomática, el peruano Manuel Meoño, dijo que "nuestro congreso se realiza en absoluta reserva por seguridad para los miembros de la logia y para evitar malos entendidos".
El encuentro, en el cual participan delegados de todo el continente americano y de algunos países europeos, como España, Francia e Italia, se lleva a cabo en el hotel Tequendama, uno de los más exclusivos de Bogotá.
Meoño afirmó que el conclave, que inició bajo rigurosas medidas de seguridad, trabajará con dos agendas, una interna y otra abierta, para diferenciar los asuntos institucionales de los temas de interés global.
En la agenda institucional, los delegados discutirán asuntos internos de las logias masónicas en el mundo, debate que se hará de manera "discreta y reservada", dijo Meoño.
Explicó que los masones también analizarán, sobre la base de ponencias, algunos temas de política internacional, crisis económica, medio ambiente y asuntos sociales.
Los masones, a nivel mundial, cada vez buscan una mayor participación en eventos públicos, pero manteniendo cierto grado de discreción, dijo Meoño durante la apertura del Congreso que finaliza el próximo sábado.