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Apuntes sobre la masoneria femenina en Indoamerica(Mexico)

Por la MM:. Digna G. Medina

En 1883 se crearon en México las primeras logias co-masónicas, jurisdiccionadas a la Gran Logia Mexicana del estado de Puebla, entre ellas la llamada “Juana de Arco”. Se conoce que, en 1891, se instaló en Nuevo Laredo, Tamaulipas, una logia femenina llamada “Josefa C. de Cantón”. Posteriormente, en 1898, se reforman en el Norte de México cuatro logias integradas por mujeres.

En la época contemporánea se inscribe la constitución de la logia femenina “Alma Mexicana No. 9” y así se inicia en la Masonería Escocesa un grupo de mujeres progresistas médicas, algunas de ellas impulsadas, a partir de 1935, por hermanos de la logia “Reforma 33 No. 5”, jurisdiccionada a la Gran Logia Unida de México. En 1945 se adhiere al Rito Nacional Mexicano, es reconocida oficialmente y se le expide su carta patente en 1958. Siete años después, el 17 de marzo de 1965, decide separarse de ese rito y trabajar, a partir del 21 de mayo de ese año, de manera independiente y bajo el Rito Escocés Antiguo y Aceptado.

El 24 de mayo de 1975, surge la respetable logia simbólica “Leona Vicario No. 17”, en el Oriente del Distrito Central, Acuña, logia pionera bajo los auspicios de la Gran Logia Unida “Alma Mexicana”.

El 30 de marzo de 1977, la Respetable Logia Simbólica Femenina “Teoyocihuatl No. 21” levanta columnas y recibe su Carta Patente el 12 de abril de 1978 de la Gran Logia Unida “Alma Mexicana”. Esta Gran Logia está conformada por más de 30 agrupaciones femeninas, dos de las cuales se ubican en el extranjero (Estados Unidos y Venezuela).

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