A L.·. G.·. D.·. G.·. A.·. D.·. U.·.
A.·. B.·. L.·. R.·. L.·. S.·. José Ma. Morelos y Pavón, No 67-1
Mis QQ.·. HH.·., hoy en este humilde burilado, deseo compartir con ustedes, mi sentir, mis deseos y mi anhelo de que en esta Log.·. reine la Paz, la Armonía y la Fraternidad; es por eso que lo he titulado:
DEBERES Y OBLIGACIONES DE TODO MASÓN
Primeramente, quiero mencionar, que el respeto a las opiniones y a las creencias religiosas, deben prevalecer en todo momento, tomando en cuenta que somos Hombres Libres y que como único requisito para ser masón es la creencia en un Ser Supremo; esto implica, que ningún Ateo tenga cabida dentro de la masonería.
Ahora pues, los deberes de todo masón están encaminados en tres aspectos:
Hacia la Divinidad, llámese como se llame. (Según sea la creencia del Hermano), pues tengamos en cuenta que el Primero y más grande mandamiento dice: Amaras a Dios sobre todas las cosas. Dicho lo anterior, podemos afirmar que: El primer deber moral del hombre es conocer a Dios para amarlo y respetarlo.
Hacia si mismo. Siendo una de las preguntas que se encuentran en el Trian.·. del Cuar.·. de Ref.·. y que consiste en conocerse a si mismo para corregir nuestros defectos; respetarse a si mismo para aprender a querer a nuestros semejantes y buscar el acercamiento intimo, despojándose del egoísmo.
Hacia la Sociedad, en la que vive y se desenvuelve. Buscando la educación moral física e intelectual que le permita ser útil a los suyos y a todos los que nos rodean, sin importar la raza a la que pertenezcan, ni mucho menos sus creencias religiosas, ni sus ideas políticas.
Las Obligaciones de todo masón en lo que se refiere a la orden son:
1. No revelar los secretos que se le han confiado a ninguno que no sea un legítimo masón.
2. “No escribir, grabar o formar algún signo por el cual puedan conocer la palabra sagrada y los medios de comunicar y reconocer entre los masones”.
3. Es obligación Masónica el ayudar y socorrer a los hermanos hasta donde alcancen sus fuerzas, tanto moral como materialmente; así como también el dominio y la disciplina de los sentimientos evitando los desbordes pasionales que muchas veces diluyen las más notables intenciones. Debemos anteponer el amor al odio, el perdón al rencor, la humildad a la ira, la generosidad al egoísmo y la tolerancia hacia todos y cada uno de los actos de nuestros semejantes.
QQ.·. HH.·. No olvidemos lo que dice el Código Moral Masónico: «El verdadero culto que se da al Gran Arquitecto, consiste principalmente en las buenas obras» «Haz bien por amor al mismo bien» «Estima a los buenos, ama a los débiles, huye de los malos, pero no odies a nadie» «En la senda de honor y la justicia esta la vida, mas el camino extraviado conduce a la muerte»
Por lo tanto y con los argumentos expresados hasta aquí, puedo asegurar que el masón debe demostrar ser libre para poder servir al Ser Supremo a sus semejantes y a si mismo, confirmando plenamente lo expresado en el Salmo 133 que a la letra dice:
1 ¡MIRAD cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos igualmente en uno!
2 Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Y que baja hasta el borde de sus vestiduras;
3 Como el rocío de Hermón, Que desciende sobre los montes de Sión: Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna.
