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| General Eloy Alfaro |
Eran las 09:45 cuando las inmediaciones del mausoleo al líder liberal, en el Cementerio Patrimonial de Guayaquil, fueron ocupadas por integrantes del Movimiento Alfarista (MBA), de la Logia Masónica y por Jorge Jijón Márquez de la Plata, descendiente de Alfaro.
Llegaron para presidir el acto conmemorativo de los 100 años del asesinato al Viejo Luchador. Jijón, de 22 años, tiene conexión genealógica con Esmeralda Alfaro, hija del heroico personaje.
“Desde que una pequeña fracción de los restos del general Alfaro fueron traídos aquí, en el 2008, le traemos el corazón rojo que representa el amor que él tuvo por su familia y la patria”, dijo.
Luego de la entrega de tres ofrendas florales, Manuel Pérez Moreno, del MBA, sostuvo que “políticamente siguen vigentes los postulados de la revolución Alfarista”. Y reclamó el derecho de este grupo para participar en la revolución actual.
Guillermo Campaña, Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo del Ecuador, también destacó el legado de Alfaro, como masón. “Dio todo su apoyo para la creación del Supremo Consejo Grado 33 para de la República del Ecuador, organismo masónico que hoy presido”.
En el evento también estuvo Esteban Delgado de la Cuadra, director del Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC), regional 5. Él repasó hechos históricos que llegaban a la conclusión de que hay un Ecuador antes y después de Alfaro.
