Por el H:.Horacio López
Enmallada en un muro, prisionera
gime, mansa, la Palabra
Las letras que la atenazan
no le dejan ver la playa
Pero se viste de gala
cuando un ojo la rescata
Lo penetra. Una vez dentro
es que sus dardos prepara,
baja y se ponen tensas
las cuerdas de la garganta
Sin temor deja abierta tu ventana
que la flecha que te lanza
se hará perfume en tu casa
Cortará como una espada
a los montes, a las aguas
y a los bosques, rama a rama
Pondrá luces a las cosas
cuando las rocen sus alas
Su pincel hará siluetas
para atrapar los fantasmas,
y dará nombre al Amor
(que de veras le hace falta)
¡Es que es tan bonito verla
andando por las terrazas!,
cosiendo y descosiendo entuertos,
destripando los cerrojos,
soltando sus breves vientos
en teléfonos y plazas
y hasta limpiando de polvo
las miradas
De orilla negra a orilla negra
pone un puente La Palabra:
Pasarán por él las nubes
historias buenas y falsas
Pasarán por él monedas
Pasarán por él las lágrimas
Pasarán por él sus sombras
los Señores de las Balas
que, inocente como la pólvora,
también La Palabra mata.
Señores
Yo no pido La Palabra:
he de hallarla
LA PALABRA
sábado, julio 07, 2007