Por Rubén Rivas García
“Toda institución que verdaderamente cultive valores morales, produzca espíritus libertarios, fomente la filantropía y el libre pensar, merece ser respetada, y defendida su existencia”
El día 21 del presente con motivo del solsticio de verano, fecha simbólica y conmemorativa para todos los Masones diseminados por todo el globo terráqueo, el pueblo masón de la gran logia del Estado de Nayarit, dirigido por el muy respetable gran maestro Enrique Díaz López, llevó a cabo su festejo, ritual y ceremonia fuera de las puertas de su templo, en conocido centro de convenciones de hotel de esta capital.
Celebración de Solsticio de verano ó, Vernal del 21 de Junio, en el que ocurre el día más largo en virtud de encontrarse el sol en su declinación máxima, así como también celebran, el solsticio de invierno ó, Hiemal el 21 de diciembre, en el que ocurre la noche más larga. Para los habitantes del hemisferio sur la situación se invierte, el solsticio de verano tiene lugar el 21 de diciembre y, el de invierno, el 21 de junio; el término solsticio significa, “Sol inmóvil”. Estos días son de celebración masónica, porque forman parte de la simbología de los rituales de la orden, así como los astros de la bóveda celeste, y otros de aparentemente de más o menor importancia.
Gran festejo ritual y ceremonia solemne, que celebra la augusta institución en el estado con un gran banquete, con el fin de reunir a todos los hermanos masones de todas las logias de su jurisdicción dos veces al año, como ha sido la costumbre desde la más remota antigüedad; en el que se brinda por todos los hermanos masones esparcidos sobre la superficie de la tierra, que han cooperado al engrandecimiento de la augusta institución masónica y de la humanidad; por los dignatarios de la Gran Logia y los recién iniciados; por todas las logias simbólicas del mundo; por el muy respetable gran maestro y, por el gobierno de la Nación.
Ágape en el que asistieron esposas, hijos, amigos e, invitados especiales de los hermanos masones, quienes con atención y regocijo participaron de la formal ceremonia para posteriormente, disfrutar de alegre fiesta con exquisitas viandas, generosos vinos y alegre música; para finalmente, despedirse todos felices y contentos con la satisfacción de haber cumplido con el mandato de la ortodoxia Masónica, conocer nuevos rostros y, él haber intercambiado gratas y sustantivas impresiones, reforzando lazos de hermandad y amistad. Miembro de la Asociación de Periodistas y Escritores de Nayarit A.C. (APENAC)
