Rosa Elvira Presmanes
C. MARTÍNEZ. Con el objetivo de abrir el mundo de la masonería a la sociedad y reivindicar "el respeto y el prestigio de los que goza en otros países", Rosa Elvira Presmanes, Gran Maestra de la Logia Femenina de España, ofreció ayer una conferencia en Alicante, como paso previo a la constitución mañana mismo (y ya a puerta cerrada) de la primera logia femenina de la Comunidad Valenciana, que tendrá su sede en Alicante.
Ítaca es la denominación de esta nueva agrupación, que reúne a una veintena de mujeres comprometidas con la filosofía masónica procedentes de Valencia, Castellón, Murcia, Albacete y Almería. "Crear esta logia es una alegría porque supone transmitir toda la tradición ritual y todo lo que hemos avanzado a las mujeres de esta zona, porque nuestra misión es trasladar todo lo que conseguimos a la sociedad".
No fue hasta después de la dictadura cuando en España se pudieron constituir logias femeninas. Hasta entonces se denominaban "de adopción", tuteladas por hombres. "La masonería es una orden iniciática, una escuela de conocimiento para buscar la sabiduría, con unas raíces ancestrales en cuanto al bagaje simbólico y ritual que maneja, que intenta reflexionar sobre la vida y los temas sociales".
Presmanes, que es masona desde hace veinte años, asegura que "a mí me ha servido para conocerme más y mejorar personalmente, porque es una gran escuela de tolerancia y de convivencia con el otro".
Sobre el secretismo y acusaciones de secta que ha recibido la masonería, manifiesta que "en una secta es fácil entrar y difícil salir; aquí lo difícil es entrar y lo fácil salir".
Ítaca es la denominación de esta nueva agrupación, que reúne a una veintena de mujeres comprometidas con la filosofía masónica procedentes de Valencia, Castellón, Murcia, Albacete y Almería. "Crear esta logia es una alegría porque supone transmitir toda la tradición ritual y todo lo que hemos avanzado a las mujeres de esta zona, porque nuestra misión es trasladar todo lo que conseguimos a la sociedad".
No fue hasta después de la dictadura cuando en España se pudieron constituir logias femeninas. Hasta entonces se denominaban "de adopción", tuteladas por hombres. "La masonería es una orden iniciática, una escuela de conocimiento para buscar la sabiduría, con unas raíces ancestrales en cuanto al bagaje simbólico y ritual que maneja, que intenta reflexionar sobre la vida y los temas sociales".
Presmanes, que es masona desde hace veinte años, asegura que "a mí me ha servido para conocerme más y mejorar personalmente, porque es una gran escuela de tolerancia y de convivencia con el otro".
Sobre el secretismo y acusaciones de secta que ha recibido la masonería, manifiesta que "en una secta es fácil entrar y difícil salir; aquí lo difícil es entrar y lo fácil salir".