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El templo de la Logia Roque Pérez por dentro |
La masonería tiene la particularidad de ser una institución con el raro destino de ser halagada o difamada, esto último responde a la ignorancia del común de la gente, del profano, porque debemos tener en cuenta que su historia forma parte de la historia de la Humanidad, de la historia Argentina y por ende de la historia Regional que hace a la construcción social y cultural de nuestro pueblo misionero", cuenta Elsa Zacarías, historiadora y estudiosa de la influencia de la masonería y la Logia Roque Pérez en los primeros años de colonización y organización del actual territorio posadeño y misionero. Si bien en el primer artículo se intentó hacer una introducción al interesante y, por qué no, misterioso mundo de la masonería y de las hermandades secretas, lo que persigue este artículo es seguir desmitificando ese halo enigmático que rodea a estas instituciones de antaño, dando cuenta de las actividades que realizaron sus miembros cuyos nombres hoy figuran entre la lista de ilustres que protagonizaron los primeros pasos de la capital misionera.
Tal es el caso del gobernador del territorio de las misiones Rudesindo Roca, tucumano hermano del presidente Julio Argentino Roca, quien fue integrante y "venerable" (presidente) de la Logia Roque Pérez entre los años 1882 a 1890. Roca, además de ser un hombre reconocido en las filas de los notables que formaron parte de la recordada "generación del 80", fue quien creó el primer juzgado letrado en 1883 con los fueros Civil, Comercial, Correccional y Criminal.
Según reza la publicación del Centro de Estudios Históricos del Instituto Superior Antonio Ruiz de Montoya (ISPARM) también fundó la Subprefectura Marítima, constituyéndose como policía de costas, cuya misión era luchar contra el contrabando y vigilar la navegación.
En esos años también impulsó la exploración del territorio de manera oficial y en forma privada y según data la información envió a Hunter Davidson, hombre de confianza, a realizar una expedición por el río Paraná hasta las Cataratas, momento en que se conforma la Comisión Hidrológica.
Posteriormente promueve el primer servicio fluvial de pasajeros con la puesta en marcha del "Vaporcito Sol de Mayo", embarcación con la que brinda el servicio de transporte desde Posadas a San Ignacio. En paralelo se crean varias compañías de navegación como la "Platense"; la de Nuñez y Gibaja; la de Juan Domingo Barthe o la de Juan Mola.
A Roca también se le atribuye la mejoría en las comunicaciones con Buenos Aires y la creación del Banco de la Nación Argentina en 1882.
"La masonería en nuestro país ya actuaba desde antes de 1810, luego de la Revolución de Mayo. Trabajó a favor de la libertad e independencia de América, independencia Argentina y por la implementación de formas democráticas, liberales y progresistas. Derrotado el gobierno de Juan Manuel de Rosas, actuó con más intensidad y mayor influencia en las esferas gubernamentales, pero siempre respaldadas en formas de logias y sociedades, rodeadas para los profanos de cierto misterio, pero dentro de ellas se trabajaban con disciplina, por los ideales de luchas contra toda forma de despotismo y opresión", explica Zacarías. En ese orden resalta que las actividades siempre estuvieron "a favor de las conquistas liberales, del orden, del progreso y la razón".
Moritán y Lanusse
El ex gobernador Benjamín Moritán fue venerable de la Logia de 1891 a 1893, tiempo que permaneció en el territorio provincial. Mantuvo la misma línea que Roca y fue el fundador del departamento central de Policía y quien lideraba el equipo que finalmente establece los límites entre nuestra provincia y Corrientes.
En 1891, con su ayuda se crea el Club Unión y el Centro Español, luego ambos se fusionan y se crea el recordado Club Social. La partida de Moritán hacia Buenos Aires se da en octubre de 1893.
El ex gobernador Juan José Lanusse desarrolló el cargo y fue venerable de la Logia Roque Pérez desde 1896 hasta 1905.
Fue uno de los grandes promotores del desarrollo de la colonización en la zona, tal es así que en 1898 ordenó realizar un censo en San Javier; San José; Santa Ana; Candelaria y Cerro Corá para conocer más sobre la organización de las colonias de inmigrantes.
Ya en ese entonces la potencialidad turística de nuestra provincia estaba en la mente de los gobiernos pioneros porque fue el mismo Lanusse quien en 1902 promulgó la ley "Olmedo" que reserva para el Estado la superficie que hoy constituye el Parque Nacional Iguazú. Además, el ex Gobernador fue precursor de viajes y expediciones.
Entre sus actividades destacadas, en 1900 prohíbe la prostitución clandestina en el territorio y se realizan controles tanto en la zona de actividad portuaria como en obrajes. Un año más tarde comunica oficialmente a la ciudadanía la llegada del primer teléfono urbano a Posadas y se instala la Usina, - en la zona de Villa Blosset, en la bajada al viejo puerto cuyo edificio estuvo en pie hasta el inicio de las obras de la actual Costanera-.
Finalmente, fue impulsor del cultivo de arroz en Azara y Apóstoles, debido a la baja de la producción del tabaco y en 1904 puso a disposición todas las herramientas para que la producción de yerba mate se realizara en escala en la zona de San Ignacio.
