Por Alfred López
Cuaderno de Historias – mar, 23 ago 2011
La ciudad subterránea que Mao mandó construir bajo Pekín
Durante la etapa de la Guerra Fría en la que estaban enfrentados los dos potentes bloques que dominaban el planeta, el máximo dirigente de la República Popular China ideó un mecanismo para que los más de 6 millones de habitantes que residían en Pekín pudieran salvar sus vidas en caso de un ataque nuclear. Para ello, a finales de los años 60, mandó construir todo un entramado subterráneo que albergase suficiente espacio para sus ciudadanos.
La galería de pasillos se prolonga durante kilómetros
Era la ciudad subterránea de Pekín, un lugar que jamás se tuvo que utilizar y que permaneció cerrado al público durante varias décadas, debido al mutismo por parte del gobierno chino y su secretismo respecto al tema. Varios centenares de miles de ciudadanos chinos fueron utilizados como mano de obra para llevar a cabo un proyecto de diez años (1969-79) en el que se construyeron 85 kilómetros cuadrados de ciudad subterránea bajo la capital China. Entre ellos, escuelas, teatros, cines, restaurantes, oficinas, hospitales, fábricas e incluso alguna pista de patinaje… Todo un mundo escondido bajo la tierra para poder llevar una vida alejados de la amenaza de la Guerra Fría.
Las galerías, antes utilizadas, se encuentran hoy en día abandonadas
Sin embargo, el hipotético ataque nuclear nunca se produjo y la metrópolis quedó en el olvido. Se tapiaron todos los accesos y nada se supo de este lugar hasta bien entrado el siglo XXI.
Parte de ese espacio fue utilizado como almacén por el Gobierno. Aquellos que habían conseguido acceder, utilizaban alguno de sus espacios como lugar de reunión, como algún que otro colectivo de jóvenes urbanos, niños que bajaban a jugar por los largos pasadizos, e incluso ciudadanos que habilitaron algunas partes para montar un negocio y utilizarlo como tienda o albergue a bajo precio.
en la actualidad, está plagada de guias turísticos clandestinos
En la actualidad no se puede bajar, pero teniendo buenos contactos y sabiendo dónde y a quién preguntar, es posible conseguir un acceso desde alguna de las numerosas puertas que se encuentran dentro de diferentes locales y/o negocios repartidos por toda la ciudad de Pekín. Hay toda una red de guías turísticos clandestinos que por unos pocos yuans te llevan de excursión por una parte de esta ciudad 'enterrada'.
Uno de esos accesos rápidos utilizado por bastantes turistas y curiosos que desean visitar la ciudad subterránea está en la siguiente dirección: 62 Damochang West Street, Qianmen.
La ciudad subterránea que Mao mandó construir bajo Pekín
jueves, agosto 25, 2011