Por Joseh Hodara
Hoy es un día memorable para la ciencia, o al menos para los 8000 investigadores que trabajan desde hace más de una década en el CERN, localizado en Ginebra. El superacelerador podría confirmar o desmentir postulares centrales de la física de las partículas. ¿Cómo se gestó el mundo? ¿Por accidente? ¿Por un choque accidental de elementos explicado por la teoría del Big Ban? O bien, ¿por algún designio divino que está lejos de nuestra humana comprensión? Interrogantes que intranquilizan el sueño de científicos y teólogos.
Con la participación y ayuda de más de 80 países, con la dedicación de 10 mil investigadores, durante más de una década, el superacelerador inicia hoy sus actividades para buscar, con las interacciones veloces de protones, la partícula-Dios que explicaría el origen ( que no el propósito) de la humana vivencia en el universo. Se trata de reconstruir- o imaginar- qué ocurrió instantes después del Big Ban, circunstancia que explicaría el origen de la vida. Se busca en especial la " partícula Higgs "que confiere masa a las entidades conocidas. Millones de dólares se invirtieron en este empeño, circunstancia que lleva a preguntar " para qué? Y la respuesta: para la grandeza y la centralidad del Hombre. Un himno a la curiosidad, un osado experimento, que revelan que motivos como la curiosidad intelectual y el asombro constante, forman parte de nuestra índole.
Las actividades de este gigantesco artefacto también ratificará o desmentirá teorías, como la doble naturaleza de la luz – campo electrónico y sucesión de partículas – e imprimirá al concepto "masa " nuevas dimensiones. Einstein se regocija con las cenizas que dejó su cuerpo. Incluso si sus teorías se descartan.
Este proyecto revela, por añadidura, que norteamericanos, rusos, japoneses, israelíes y latinoamericanos pueden ensamblar un concierto armónico, más allá de las disputas ocasionadas por los políticos o los grandes intereses. El superacelerador es un himno al Humanismo y no reniega necesariamente de lo que el texto bíblico relata. Científicos y teólogos tendrán alimento para regalarse.
Fuente: CNNexpansion.com