RECUPERADO. Una imagen del Museo de La Ramada, que será inaugurado el martes próximo. DIRECCION DE PATRIMONIO CULTURAL
La casa en la que descansó el Libertador en enero de 1814 ahora se abre como museo. En el edificio ubicado en el departamento Burruyacu se podrán ver objetos de época y seguir la historia en una "línea del tiempo".
La casa de La Ramada de Abajo donde alguna vez descansó el general José de San Martín ya es un museo dedicado íntegramente al Libertador. El espacio será inaugurado el martes próximo, cuando se celebre un nuevo aniversario del regimiento de Granaderos a caballo.
En enero de 1814, los tucumanos vieron llegar a San Martín, que venía a hacerse cargo del Ejército del Norte. Desde entonces, las dos historias, la tucumana y la sanmartiniana, quedarían ligadas para siempre en la casa que Rufino Cossio y Villafañe Aráoz había dispuesto para cobijarlo al Libertador durante su enfermedad, en abril de ese año.
Dice la historia que allí, bajo un algarrobo, se le ocurrió a San Martín atacar al centro del poder realista, la ciudad de Lima, por mar, previo cruce de los Andes.
La casa de La Ramada de Abajo donde alguna vez descansó el general José de San Martín ya es un museo dedicado íntegramente al Libertador. El espacio será inaugurado el martes próximo, cuando se celebre un nuevo aniversario del regimiento de Granaderos a caballo.
En enero de 1814, los tucumanos vieron llegar a San Martín, que venía a hacerse cargo del Ejército del Norte. Desde entonces, las dos historias, la tucumana y la sanmartiniana, quedarían ligadas para siempre en la casa que Rufino Cossio y Villafañe Aráoz había dispuesto para cobijarlo al Libertador durante su enfermedad, en abril de ese año.
Dice la historia que allí, bajo un algarrobo, se le ocurrió a San Martín atacar al centro del poder realista, la ciudad de Lima, por mar, previo cruce de los Andes.
Olvidada y saqueada por décadas, la casa ha sido puesta en valor y convertida en un museo sanmartiniano como parte de los actos por el bicentenario de la Revolución de Mayo de 1810.
"En la casa de La Ramada de Abajo, que simboliza la presencia de San Martín en Tucumán, se hizo un trabajo muy importante en techos, pintura, iluminación interior y exterior , sanitarios nuevos (uno equipado para discapacitados). Vale destacar el aporte de René Alfaro, Administrador del Ente de Infraestructura Comunitaria de la provincia y su equipo, que colaboró codo a codo en la obra", dijo a LA GACETA Mercedes Aguirre, directora de Patrimonio Cultural de la provincia.
Aguirre relató que en la casa se podrán ver un uniforme de Granaderos, libros, billetes, mobiliario y una colección de soldaditos con vestimenta de la época que acaparan la atención de los chicos. Además, la Casa Histórica prestará una réplica del sable corvo de San Martín.
"La comisión del bicentenario, formada por la ministra de Educación, Silvia de Temkin; el secretario general de Gobierno Ramiro González Navarro y el presidente del Ente Cultural, Mauricio Guzmán, tomaron la puesta en valor de la casa como primera obra del Bicentenario. Es un espacio que se constituirá como un circuito para las escuelas. Tanto es así, que el colegio salesiano Tulio García Fernández consiguió que el gobierno de Mendoza done, además de una bandera de los Andes, tierra y un retoño del olivo del histórico campamento del Plumerillo, donde San Martín organizó las del Ejército de los Andes antes de cruzar la cordillera", agregó Aguirre.
"Se articula el rescate del patrimonio y el museo en sí y esto permite vivir e interactuar con un patrimonio vivo. La casa y su historia habla de la Tucumán misma y de su hospitalidad que es característica", expresó a LA GACETA el museólogo Gabriel Miremont, que trabajó en la nueva propuesta museológica junto a Carlos Piñero y que tiene en su haber la puesta del Museo Arqueológico de Alta Montaña, en Salta, y el Museo del Lillo, que está en obra.
Historia y ambiente
"Hay dos aspectos, la ambientación de un San Martín preocupado por defender la cultura y la contextualización ambiental; siguiendo una museografía tradicional, se exhibe tanto el contexto histórico como documentos, libros y otros objetos personales que pertenecen a colecciones privadas", expresó Miremont. Agregó que esa contextualización se ve reflejada en la línea de tiempo que armó Cultura. "Se verá vajilla usada en la casa de San Martín en Grand Bourg, Francia, y un florero de vidrio prensado de 1910 conmemorativo del centenario del Grito de Mayo de 1810 con la imagen del general. Además del rescate del predio y del histórico algarrobo se recuperó un testigo. Esto es, muestras de la pintura original, de 1814, de una casa que se habitaba y que tuvo muchas ampliaciones y cambios de estilo. Hay pintura en stencil y partes de adobe", agregó Miremont.
Por su lado, Aguirre aseguró que el papel de la Escuela 313 "Solar Histórico General San Martín", contigua al museo, es invaluable. "Son esos chicos, que estudian a diario en el predio histórico de La Ramada de Abajo, y esos docentes los que guían a sus compañeros que los visitan de otras escuelas", dijo Aguirre.
El museo contará con una encargada, cuatro guías, un sereno, dos personas de mantenimiento y personal de guardia.